Escuela rural

Escuela rural "Los Almácigos"

La escuela rural Los Almácigos es un proyecto de la Fundación SM en República Dominicana junto a Selvas Amazónicas en la Misión de los frailes dominicos. Tiene como objetivo facilitar a los niños y niñas haitianos las herramientas necesarias para que puedan incorporarse a la educación formal.

Los Almácigos es un pueblito situado a 20 km de Santiago de los Caballeros en República Dominicana. Es una zona rural dedicada a la agricultura, donde la mayoría de su población es haitiana o de descendiente de haitianos. A pesar de que muchos han nacido en República Dominicana, les resulta casi imposible que se les reconozca la nacionalidad; por tanto, ni son reconocidos en el país en el que viven ni en Haití, viéndose abocados a una situación de extrema vulnerabilidad.

La población de Los Almácigos, tanto dominicanos como haitianos, es muy humilde. El municipio es considerado como uno de los más pobres del país.

La mayoría de los niños y niñas no hablan español, sino creole, lo que dificulta enormemente su aprendizaje e incorporación a la escuela formal de República Dominicana. Otros muchos aprenden creole en el seno de la familia, pero mezclado con palabras en español. No hablar correctamente ni creole ni español les impide que puedan insertarse y adaptarse a la escuela dominicana. El Estado dominicano no provee ningún tipo de asistencia para ayudar a resolver esta dificultad lingüística por la que atraviesan muchísimos niños dominico-haitianos.

Por este motivo, era necesario este proyecto, ya que todos los niños y niñas de la zona crecían sin acceso a la educación. Es habitual que, sin educación, se conviertan en peones mal pagados para la agricultura o la construcción. Por tanto, estas familias están en riesgo de vivir sumidas en la pobreza y sin oportunidades para el futuro.

Esta escuela proporciona formación a diversos niveles y a edades comprendidas entre los 5-6 años hasta los 12 años. El profesor, de origen haitiano, conoce las necesidades educativas del alumnado. El proyecto también realiza un acompañamiento del docente para que pueda comunicarse con sus alumnos en español, ayudándole también a desarrollar nuevas destrezas, habilidades y estrategias para trabajar con los estudiantes.

Con lo aprendido en el aula, se brinda a los niños la posibilidad de acceder al sistema educativo.

El proyecto también cuenta con una sala de tareas y biblioteca que permite tener un espacio donde hacer los deberes, consultar libros, resolver dudas y acceder a ordenadores. Es un refuerzo imprescindible en su aprendizaje y su formación.

El programa de alimentación es, asimismo, un área muy importante del proyecto. La extrema pobreza en la que viven las familias impide que los niños tengan una correcta alimentación, lo que dificulta el aprendizaje. En la escuela se ofrece desayuno y comida al alumnado. De no ser así, muchos de los niños ayunarían con frecuencia, como sucede en otras muchas familias.